Thunder establece un récord de franquicia con la 61ª victoria, mientras Giddey lleva a los Bulls a vencer a los Lakers.

PARÍS, 29 de marzo de 2025: La leyenda del boxeo ucraniano Oleksandr Usyk declaró a la AFP que planea extender su carrera para seguir brindando ayuda financiera a militares y civiles mientras persigue su objetivo de convertirse una vez más en el campeón indiscutible de los pesos pesados.

El boxeador de 38 años, quien ostenta todos los títulos principales de los pesos pesados ​​excepto el cinturón de la FIB que ostenta Daniel Dubois, ha sacado fuerza de su patria devastada por la guerra desde la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022. Sus triunfos, en particular dos victorias sobre Tyson Fury y victorias contra Anthony Joshua y Dubois, han ayudado a mantener la atención mundial sobre Ucrania.

En una extensa entrevista, Usyk agradeció a su difunto padre, un veterano del ejército soviético, por inculcarle resiliencia y disciplina. Expresó su admiración por los héroes ucranianos, tanto históricos como modernos, en particular por los soldados que defienden el país. “Representar a Ucrania, difundir información sobre la guerra y apoyar económicamente a nuestro ejército y a la población civil son motivaciones clave para seguir en el boxeo profesional”, declaró. “Me siento genial, estoy listo para cualquier reto y aún quiero recuperar mi título de campeón indiscutible”.

Usyk reconoció a Fury como su rival más duro y cree que el boxeador británico volverá al boxeo, aunque posiblemente en una posición diferente. Manteniéndose invicto con 23 victorias, incluyendo 14 nocauts, Usyk atribuye su resistencia a las enseñanzas de su padre.

Su padre, también llamado Oleksandr, luchó en Afganistán durante la ocupación soviética de una década y sufrió graves lesiones. “Era un hombre duro que me inculcó disciplina y confianza en mí mismo. Siempre decía que sería un campeón, incluso cuando nadie más lo creía”, recordó Usyk. El padre de Usyk falleció justo antes de presenciar la victoria olímpica de su hijo en 2012, y el boxeador aún honra su memoria. Al dedicar su última victoria contra Fury a las madres ucranianas, enfatizó la tragedia de la guerra: "Todos los ucranianos han perdido a alguien. Como padre, comprendo profundamente el dolor de las madres que pierden a sus hijos. Esto nunca debería suceder en el mundo actual".

Tras su victoria en Riad, Usyk alzó un sable que perteneció al líder ucraniano del siglo XVII, Iván Mazepa, destacando la larga historia de resistencia de Ucrania contra la dominación rusa. Señaló que, si bien se le desaconsejó unirse al frente, ha utilizado su fortuna para apoyar la reconstrucción y las labores humanitarias.

Entre sus contribuciones, Usyk financió la reconstrucción de la casa de su difunto amigo Oleksiy Dzhunkivskyi después de que las fuerzas rusas lo mataran en Irpin. Su fundación también ha recaudado millones de euros para ayuda militar, reconstrucción e iniciativas humanitarias.

En cuanto a su legado, Usyk cree que es demasiado pronto para definir su carrera. “La evaluación final de mis logros llegará cuando me retire”, concluyó.